jueves, 10 de octubre de 2013

Demos la bienvenida al elemento 115

Cuando uno es un chaval que va al instituto y le dicen que tiene que aprenderse la tabla periódica, hay que reconocer que es bastante duro. Después llegas a la universidad y descubres que te sabes todos los elementos, las características comunes de todos los grupos, todas las valencias, los isótopos más importantes, conoces el nombre de muchos de los descubridores, los pesos atómicos de los elementos más importantes e incluso puedes contar anécdotas que te han sucedido en el laboratorio con ciertos elementos. Increíble pero cierto. Soy la prueba viviente.

 Chuck Norris es de letras. Sólo reconoce el elemento sorpresa.

Lo peor de todo es que, como si ya no hubiera destrozado suficientes vidas, la tabla no para de crecer. De hecho, el 27 de agosto de 2013 se hizo público que unos científicos suecos habían sintetizado en un laboratorio el elemento 115.

Estos científicos han reproducido el experimento que hace 10 años llevaron a cabo unos rusos, con lo que queda confirmada la existencia del nuevo elemento. De momento, el elemento llevará el nombre de Ununpentio. Ahora, deben ser los laboratorios de la IUPAC los que certifiquen de nuevo el experimento para que se le busque un nombre definitivo, mucho más sencillo que el nombre genérico que se la ha dado. Se calcula que para que esto ocurra pasarán unos 10 años. Espero que no tengáis prisa.


El sueño de todo friki.

El tiempo de vida media de este elemento es de apenas unas milésimas de segundo. Por este motivo es imposible encontrarlo en la naturaleza y debe ser creado en un laboratorio. Obviamente no es el único. El primer elemento sintético fue el Tecnecio, un elemento de transición. Más tarde, todos los elementos transuránidos fueron descubriéndose de la misma forma.

Para sintetizar estos elementos se llevan a cabo experimentos de fusión. En este caso se bombardeó el isótopo 243 del Americio (el más estable, también es sintético) de número atómico 92, con Calcio-48, de 20 protones. Cuando se consigue que los dos núcleos choquen, el resultado es un nuevo elemento de 115 protones, el Ununpentio, que se desintegra en milésimas, pero dura lo suficiente como para medir ciertas caraterísticas físicas que demuestran su existencia.

Cuanto más pesado es un elemento, más inestable es. Pero en la década de los 50 se teorizó sobre la llamada " Isla de Estabilidad". Se cree que estos elementos superpesados serán lo suficientemente estables como para tener tiempos de vida media de minutos. Las propiedades y aplicaciones son inimaginables.


Para saber más:

http://www.webelements.com/ununpentium/